Dudas

Dos años atrás

Es mediodía de viernes y el calor está en su punto más álgido, mientras Paolo espera en un restaurante a uno de los clientes con quien ha quedado, se decide a tomar una deliciosa limonada; un comentario malicioso se deja escuchar en la mesa contigua y es motivo para que el trago se quede en suspenso en su garganta.

-No debemos descuidar nuestra vida de pareja, mira lo que le ha sucedido a Jorge, que por estar siempre enclaustrado en su trabajo su mujer le ha pintado unos cuernos…que para que cuento…

Algo se removió en su interior, como un repentino golpeteo en el estómago. Acudieron a su memoria esas llamadas extrañas que en los últimos meses recibió Margarita. Abogada en ejercicio de su profesión, Margarita divide su tiempo entre su casa, la atención a su esposo e hijos y sus intereses profesionales. Paolo se fue acostumbrando a los imprevistos en los trámites legales de su esposa, pero no le pasó desapercibido las misteriosas llamadas que no tenían horario ni fecha en el calendario, y que la profesionista atendía con actitud despreocupada y desparpajo. Al colgar el teléfono, la vida en casa seguía curso normal y él por su parte nunca tuvo pensamientos contaminantes. No hasta que sorprendió aquella conversación entre alguien desconocido y su esposa; Margy estaba de espaldas a él sentada en el sofá, no lo oyó al entrar. La voz de ella denota angustia.

-No, no puedo hacer eso, y tú tampoco. Piensa en tu familia, perderías todo. –Silencio mientras al otro lado de la línea alguien responde- No permitiré que el lodo salpique mi carrera y mi prestigio, y menos arriesgarme a perder a mi familia por una tontería. Ya conoces mi decisión, no tengo nada que pensar.

Paolo hace tintinear las llaves. La mujer da un brinco en el sillón y se vuelve rápido hacia la puerta. Paolo advierte sorpresa en su mirada y nerviosismo en sus palabras. Margy se despide con brusquedad de su interlocutor.

Y a partir de ese momento comenzó a seguir los pasos de Margy por las redes sociales, conocía la contraseña de acceso, ambos utilizaban la misma en todas sus cuentas. Idea de la propia Margie, para evitar la pérdida de información al olvidar alguno la contraseña. Y ahora más que nunca Paolo agradecía esa idea. Encontró varias conversaciones entre ella y un tal 3M, el icono del usuario aparece sin foto, no se mencionan nombres, lo mismo puede tratarse de un hombre o de una mujer.

3M –Estás en la oficina?

Margy –Sí, y muy ocupada

3M –Podemos quedar a comer?

Margy -No sé…

3M –Necesitamos hablar, ya has tenido bastante tiempo para pensar.

Margy -???

3M –Debes tomar decisiones, Margy. 

Margy –De acuerdo, pero no puedo verte hoy. Y no me busques, yo me pondré en contacto contigo. Adiós.

3M –Oye no te desconectes…es importante…

 

Continuará…

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